Los tratamientos para alinear los dientes han avanzado mucho en los últimos años. Ahora contamos con una amplia variedad de ortodoncias que nos permiten conseguir la mejor sonrisa con diferentes tipos de sistema, como es el caso de la ortodoncia invisible, los Brackets digitales o la ortodoncia lingual.
Aun así, la ortodoncia invisible y los Brackets tradicionales son las opciones más solicitadas para corregir la mordida y alinear los dientes, ya que son accesibles en prácticamente todas las clínicas del país, pero ¿conoces cuáles son las diferencias entre ambos sistemas?
Ortodoncia invisible
Sin duda alguna, la ortodoncia invisible es el tratamiento que más interés despierta entre los pacientes, ya que se trata de un sistema que pasa completamente desapercibido y que consigue arreglar prácticamente todo tipo de problemas.
Se trata de una ortodoncia que funciona a través del uso de diferentes fundas que se deben cambiar cada X días o semanas, según la prescripción del ortodoncista.
Están realizadas en un material transparente que encaja perfectamente en los dientes y va moviéndolos a su espacio correcto con cada cambio de fundas y que no se notan para nada a simple vista. Es perfecto para seguir con tu vida sin ninguna preocupación estética durante el tratamiento por tu apariencia al sonreír.
Su mantenimiento es muy sencillos e higiénico ya que, al tener que retirarlas para comer, el cepillado de dientes es muy sencillo, así como su limpieza, que solo requiere del uso de jabón, un cepillo suave y agua.
Brackets
Los Brackets son la ortodoncia clásica, que consta del uso de apliques fijos pegados a los dientes para la sujeción de los alambres encargados de presionar y mover los dientes a su ubicación final.
Es el tratamiento estrella para los problemas y mordidas más complicados, ya que su efectividad es muy alta. Además, hoy en día podemos encontrar diferentes tipos de Brackets en el mercado:
-Brackets metálicos. Son los de siempre, realizados en titanio y acero y se pegan en la parte exterior de los dientes, la que vemos al sonreír,
-Brackets estéticos. Su funcionamiento es igual al de los metálicos, solo que están realizado en cerámica, con un color muy parecido al del diente y se usan alambres, ligaduras y gomas de color blanco. Queda más disimulado, pero no es invisible.
-Brackets autoligables. Son los más novedosos, no necesitan ningún elemento extra para sujetar el arco, ya que este se mantiene mediante el uso de unos clips incorporados en el mismo Brackets.
-Brackets de zafiro. Son los más disimulados a la vista, ya que son prácticamente transparentes, pero son menos resistentes, incluso se pueden llegar a romper en las fases finales del tratamiento o en la aplicación de torques para dar inclinación a la raíz de los dientes.
-Brackets linguales. Estos se diseñan completamente a medida de cada paciente y se instalan en la parte interior (lingual) de los dientes. Se puede realizar cualquier tipo de tratamiento con ellos, pero suelen impedir el cierre correcto de la boca y ser un poco molestos para la lengua, que siempre rozará con ellos.
Una vez conocidos los tipos de ortodoncias invisible y Brackets que hay, estas son sus diferencias más importantes:
-Estética, la ortodoncia invisible gana por goleada, en comparación con cualquiera de los Brackets, es prácticamente invisible.
-Duración del tratamiento. Con la ortodoncia invisible se tarda menos tiempo que con los Brackets , con un promedio de entre 6 y 18 meses si no hay nada complejo y el paciente cumple con las horas que debe llevar puesta la ortodoncia.
-Dolores y molestias. Los Brackets causan dolor, molestias y la aparición de úlceras al contacto con los aparatos y alambres, algo que desaparece por completo con la ortodoncia invisible.
-Higiene. La higiene dental con los Brackets es laboriosa y siempre puede quedar algún resto de comida en el bracket o entre los dientes, con la ortodoncia invisible, mantenemos nuestros hábitos de higiene como siempre, ya que se puede retirar antes del cepillado.
-Revisiones. Los Brackets necesitan una cita mensual para avanzar mientras que, si el paciente es disciplinado, las revisiones con la ortodoncia invisibles pueden ser cada dos meses.
-Alimentación. Con los Brackets se deben comer alimentos duros ni pegajosos, con la ortodoncia invisible podemos comer de todo ya que se quita antes de comer y se pone al acabar tras el cepillado. Eso sí, a no ser que sea agua, hay que retirarlo para beber y comer porque se pueden manchar las fundas.
-Compromiso del paciente. Mientras que los Brackets son un tratamiento pasivo que depende de la intervención del ortodoncista para acabar correctamente, la ortodoncia invisible depende totalmente del paciente y su compromiso para cumplir con los tiempos del tratamiento, llevándolo las horas pautadas.
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