Cuando nuestros mayores o personas dependientes a nuestro cargo no pueden cepillarse los dientes por si mismos, es nuestro turno para actuar en consecuencia y mantener en buen estado sus bocas, puesto que ya sabemos lo importante que es tener una boca sana para evitar complicaciones y enfermedades. Aquí os damos consejo para los 3 tipos de casos más comunes:

• Si la persona está consciente pero no puede cepillarse sola, lo primero que tenemos que hacer es explicarle los pasos que vamos a seguir y pedirle que nos ayude en la medida de lo posible. A continuación, cepillaremos los dientes con movimientos de barrido pasando por la cara externa e interna, superior e inferior de ambas mandíbulas y sin olvidar la lengua. Finalmente, les facilitaremos un vaso con agua para enjuagarse y la expulsarán en la palangana. Repetiremos la operación con el enjuague bucal y aplicaremos bálsamo labial.
• Si la persona está inconsciente, comenzaremos por ladearle la cabeza. A continuación, prepararemos una gasa enrollada en un depresor y la empaparemos en antiséptico bucal. Con ella limpiaremos toda la boca, repitiendo con varias gasas. Después, le enjuagaremos la boca con agua con una jeringa de 10cc mientras aspiramos el contenido al mismo tiempo para evitar ahogamientos. Finalmente, aplicaremos bálsamo en los labios.
• Si la persona usa dentadura postiza, le explicaremos lo que vamos a hacer y le pediremos que colabore. Sacaremos con cuidado la prótesis usando una gasa y la apartaremos para cepillarla y enjuagarla más tarde. A continuación, limpiaremos la boca enjuagándola con antiséptico bucal o, si no es posible, con gasas empapadas en este líquido. Después, limpiaremos la prótesis con dentífrico y cepillo y, una vez enjuagada, la recolocamos en su boca.

Siguiendo estos pasos y realizándolos con paciencia y cariño, conseguiremos mantener su salud bucal en condiciones. Un pequeño gesto que también hace que ellos se sientan mejor.