El tratamiento de ortodoncia es el que se aplica por parte de un odontólogo especializado para prevenir y corregir problemas en malposiciones de dientes y mandíbulas.
El tratamiento varía en función del caso a tratar y del tipo de ortodoncia que se vaya a aplicar, pero todos tienen ciertos puntos en común, como el tener que ser realizados por profesionales especializados en ortodoncia, requerir de un estudio pormenorizado de la boca y la salud oral, siendo imprescindible la realización de radiografías para detectar problemas y caries ocultas a simple vista y el estado de las raíces de los dientes así como del resto de tejidos y huesos de la mandíbula y la arcada superior.
Fases del tratamiento de ortodoncia.
Como hemos dicho antes, hay unas cuantas etapas y estudios a realizar antes de comentar con el tratamiento de ortodoncia y, aunque pueden variar un poco según el caso y el tipo de sistema elegido entre el profesional y el paciente, estas suelen ser las fases que llevarán al paciente a conseguir la mejor versión y más funcional de su sonrisa:
1-Estudio médico.
Tras la primera visita, el ortodoncista sugerirá el tratamiento más adecuado para cada caso (Brackets tradicionales, ortodoncia invisible, Brackets trasparentes, etc.) y lo hará tras realizar un estudio de ortodoncia con el que obtener un diagnóstico preciso a través de diferentes pruebas. Con ellas detectará los posibles problemas mandibulares, de mordida, líneas medias, etc. que puedan haber. Son estas:
-Modelos de estudio. Antiguamente se realizaban incómodos moldes que se realizaban en escayola para realizar la aparatología, pero hoy en día, la mayoría de las clínicas cuentan con cómodos y limpios escáneres 3D para realizar el estudio.
-Fotografías del interior y exterior de la boca para analizar las malposiciones dentales y estudiar la simetría facial.
-Radiografías. Se necesitan de los laterales del cráneo, así como panorámicas. Con ellas se puede ver el estado real de las raíces, si existen infecciones, caries, ausencia de muelas u otros problemas.
2-Alineación de los dientes
Tras el estudio y los pretratamientos a realizar si se da el caso, se coloca el aparato elegido, empezando así la corrección del apiñamiento dentario y las desviaciones verticales a través del uso de fuerzas ligeras.
En este momento se empieza a corregir la mordida cruzada y se traccionan los dientes que no hayan salido en los casos en los que estos problemas existan. Esta fase suele tener una duración de entre 6 y 8 meses, quedando al final los dientes alineados y las arcadas niveladas.
3-Corrección de la mordida y relación molar.
Este es el momento en el que se corrige la mordida, también llamada oclusión, y se encajan los dientes en su posición correcta y definitiva. En algunos casos será necesario el uso de gomas para obtener un extra de fuerza externa que ayude en la corrección.
4-Cierre de espacios.
Cuando los dientes están alineados y la mordida corregida, llega el momento de cerrar los espacios que puedan quedar entre los dientes.
5-Acabado.
La quinta fase solo se puede iniciar cuando todos los dientes están completamente alineados, los espacios correctamente cerrados y la mordida en su posición óptima. Entonces llega el momento de realizar pequeños ajustes para perfeccionar la posición dental como el asentamiento final de los dientes, el ajuste de pequeñas posiciones dentales individuales, el igualado de raíces y la comprobación de que queda paralelas y la corrección de pequeñas discrepancias de línea media para que la inferior y la superior coincidan.
6-Retirada de los aparatos.
Una vez alcanzados todos los objetivos (dientes alineados, mordida correcta, sin espacio entre dientes, una estética correcta de la sonrisa, etc.) se procede a quitar el aparato si es fijo o a cambiar a un nuevo par de alineadores. En ambos casos estos últimos alineadores o siguientes pasos son los sistemas de retención.
7-Retención.
Una vez realizado todo el trabajo duro de los meses anteriores, llega una de las fases más importantes y menos conocidas: la etapa de retención. Cumpliendo con ella se consigue mantener los resultados, ya que los dientes tienen memoria y siempre quieren volver a su posición anterior.
El único modo de evitar que esto sea así, tirando a la basura todo el esfuerzo, tiempo y dinero invertido, es usar retenedores arriba y abajo combinadas con fundas transparentes mientras se duerme o solo las fundas para dormir, dependiendo del caso y método empleado. Solo así se puede asegurar que la sonrisa se mantenga perfecta para siempre.
Si ya te has decidido a conseguir tu sonrisa perfecta, no dudes en pedir cita con uno de nuestros especialistas en ortodoncia. Juntos conseguiremos que tengas tu mejor sonrisa.
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