Llegan las fiestas más esperadas, las Navidades y con ellas los turrones, los polvorones y dulces típicos y esas cenas y comidas de sobremesa eterna. Son una época de reunión y alegría para muchos, pero también son todo un reto a superar para nuestros clientes. Aquí te damos unos consejos para superar estos días sin perder la sonrisa.

• Hay que cepillarse la boca después de cada comida y lo tenemos que hacer sin olvidarnos de limpiar la lengua, el interior de las mejillas y el paladar, ya sea con herramientas específicas o con el mismo cepillo. Son días en los que se acumulan más restos de comida, azúcares y ácidos en la boca, así que hay que ser especialmente diligentes con la limpieza.
• Controlar los turrones y dulces. Es mejor comer turrón duro al blando, ya que el primero contiene menos azúcar, aunque hay que comerlo con cuidado ya que este y otros dulces duros, puedes causar fracturas en los dientes e incluso romper ortodoncias.
• Evitar zumos (especialmente los ácidos) y bebidas carbonatadas. Estas descalcifican los dientes provocando un desgaste prematuro. Además, están cargados de azúcares dispuestos a causar caries.
• Moderar el consumo de vino, té y café, ya que manchan los dientes.
• Cuidado con los mariscos, especialmente con los de caparazón duro o con pinchos como las cigalas o las galeras. Al comerlos sin cuidado puedes causarte heridas en la boca.
• Evitar los grandes contrastes de temperaturas con las comidas y bebidas. El comer algo muy caliente y beber seguido algo refrigerado y viceversa, puede aumentar la sensibilidad dental e incluso provocar la inflamación de los vasos sanguíneos del interior de los dientes.

Siguiendo estos consejos conseguirás salvar las fiestas con la dentadura y la boca en plena forma y, si quieres echarles una mano para sobrellevar mejor estas fechas, prueba a consumir proteínas de calidad (tanto en carnes como en legumbres), ingerir calcio, flúor y vitaminas A y D, ya que estos elementos ayudan a reforzar los dientes. Con un poco de sentido común, comiendo y bebiendo con moderación y siendo constantes con la limpieza dental, conseguirás pasar unas Navidades sin sobresaltos en el dentista.