¿Sabías que puedes cuidar la salud de tu boca a través de los alimentos que consumes?

La clave de la salud bucal está en tener unos excelentes hábitos de higiene, pero una buena alimentación también tiene influencia en el estado general de nuestra boca.

Según datos proporcionados por la SEPA, hasta un 85% de los españoles podrían verse afectados por problemas de salud bucodental, un dato que nos sitúa en cabeza de los países del sur de Europa con una peor salud bucodental. Un dato muy preocupante, ya que una mala salud bucal nos lleva a dolores orales y faciales e incluso a la aparición de enfermedades cardiacas, diabetes, renales, o cancerígenas.

Como hemos dicho, mantener una buena higiene bucal cepillándonos tras cada comida por dos minutos, usando hilo dental, colutorio si es necesario y acudiendo a las revisiones dentales es esencial, pero la comida también juega un factor determinante para mantener una sonrisa sana:

-Calcio. El 99% del calcio se reparte entre los huesos y los dientes, por lo que es esencial mantener los mejores niveles de calcio posibles. Si nuestros dientes tienen el calcio necesario son fuertes y estables y ayudan a endurecer el esmalte dental y fortalecer la mandíbula. Encontraremos fuentes naturales de calcio en los lácteos, los pescados azules o los frutos secos.

-Vitamina D. Esta nos ayuda a incrementar la densidad ósea y evita la inflamación de las encías. La podemos conseguir exponiéndonos unos minutos al día al sol y también en el queso, el hígado de ternera, el salmón o la yema de los huevos.

-Potasio. Este también es un gran aliado de la densidad ósea y dental. Además, cuando colabora con el magnesio hace que la sangre no se acidifique, algo que puede hacer filtrar el calcio de los huesos y dientes. Podemos encontrar este mineral en los plátanos, las patatas, los hígados, el aguacate o las coles de Bruselas.

-Vitamina C es forma parte de los componentes principales de las encías y nos ayuda a crear colágeno, el encargado de proteger el tejido conectivo y la elasticidad de los ligamentos y músculos. La encontraremos en los cítricos, los vegetales de hoja verde y las patatas.

-Fósforo. Al igual que el calcio, este mineral se encarga de la creación y fortalecimiento de los huesos. Lo podremos encontrar consumiendo mariscos, ternera, cerdo, queso, atún, lentejas o soja.

-Vitamina A. Esta vitamina nos ayuda a combatir la sequedad bucal y las caries y promueve la cicatrización de heridas. La podemos hallar en el hígado, las yemas de huevo, los vegetales de hoja verde, el pescado y las frutas de color naranja.

-Vitamina K. Esta es esencial a la hora de producir osteocalcina, una proteína que ayuda a incorporar el calcio en su incorporación al tejido óseo. Además, lucha contra sustancias que pueden romper el hueso, acelera la cicatrización y estimula la coagulación de la sangre. La podemos adquirir comiendo vegetales de hoja verde, lácteos, aceites vegetales, frutas como el kiwi, los higos y las uves o en los frutos secos.